28 ago 2014

Está es nuestra primera vez en Galicia y que mejor modo de llegar hasta aquí que en velero. Cada día que hemos paseado por las calles de la ciudad de A Coruña, nos ha sorprendido gratamente su gente super amable, la buena comida, la historia del centro urbano y sobre todo el buen tiempo que hemos tenido, ya que uno suele asociar Galicia con lluvias.

Torre de Hércules

Como decíamos arriba, la amabilidad de la gente nos ha hecho sentirnos todavía más cómodos de lo que ya estábamos, por ejemplo el personal de Marina Coruña ha sido muy amable en todo momento y de mucha ayuda. También toda la gente que hemos encontrado por el Camino de Santiago, pero eso es material para otro post.

Cargo saliendo de Ria da Coruña
Para un marinero o alguien como nosotros que pretendemos serlo algún día, la torre de Hércules es visita obligada. Desde Marina Coruña hemos llegado en menos de diez minutos con las bicis por un magnífico carril bici que discurre al aldo de un paseo precioso a la orilla del Atlántico. Supongo que todo es todavía mas bonito si el buen tiempo acompaña, tal y como ha sido nuestro caso.

A lo alto de la torre se llega tras pagar tres euros (creo que hay descuentos para estudiantes y jubilados). Curiosamente cuando hemos llegado hemos entrado directamente pero luego había mucha cola y es que solo permiten un máximo de treinta personas dentro de la torre para que no hayan atascos en las escaleras interiores (no hay ascensor). Estar arriba de la torre de Hércules te hace pensar en la cantidad de marinos que se ha servido de esa luz, desde romanos hasta nuestros días, es todo un símbolo activo.


Desde la torre de Hércules

Torre de Hércules

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